
Brexit: Reino Unido ha hecho su salida efectiva de la Unión Europea, y se ha convertido en el primer miembro que ha abandonado la UE. Según el resultado del referéndum que se celebró en 2016 (convocado por David Cameron), se acordó que el Reino Unido saldría de la Unión Europea. Tres años y medio después, Boris Johnson cumplió su promesa electoral del 2019: “Sacar al Reino Unido de Europa el 31 de enero”.
Salir de la UE significaría la recuperación de competencias en materia política para el Reino Unido y una mayor independencia económica. Durante la campaña del Brexit, se ha denominado la salida de la UE como una “liberación”. Ahora que la salida se ha consumado (después de 40 años), la falta de acuerdo en materia comercial amenaza la economía del Reino Unido fuera de Europa. Se ha establecido un periodo de transición que termina en enero del 2021, entonces se definirá la nueva relación entre las dos instituciones.
BREXIT DURO
La abrupta ruptura provocaría que el Reino Unido pierda su acceso al mercado europeo. Actualmente, el comercio entre Reino Unido y UE han quedado regulados por las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC). La intención de Boris Johnson es lograr una relación comercial similar a la que mantienen Canadá y la UE (sin aranceles y con la cuotas ampliadas). Varias multinacionales anunciaron su propósito de trasladar sus sedes en caso de que se produzca la ruptura dura con la Unión Europea.
Boris Johnson ha hecho un discurso agresivo respecto a las reglas que impone la UE para lograr un acuerdo comercial, y ha declarado que la es UE la que debería estar obligada a aceptar las reglas del Reino Unido. Y que “no hay necesidad de un acuerdo de libre comercio que implique la aceptación de las normas de la UE sobre política de competencia, subsidios, protección social, medio ambiente o algo similar”.
Otro callejón sin salida que ha dejado el Brexit tiene que ver con Gibraltar, uno de los estatutos que más molestó al Reino Unido decía que en caso de una salida dura, Gibraltar quedaría definida como una colonia bajo dominio inglés. Michel Barnier dijo que el territorio no se incluirá en las negociaciones y que España tendría que dar luz verde a cualquier acuerdo que cubriera la isla. “El reino de España tendrá que participar y dar su acuerdo a un acuerdo específico sobre Gibraltar”, dijo.
La respuesta de Johnson no tardó en llegar y dijo que se negocia “en nombre de toda la familia del Reino Unido”, incluido Gibraltar. y que es “inaceptable” definir Gibraltar como una colonia porque “tiene una relación constitucional moderna y madura con Reino Unido”.