Coronavirus en España: Madrid al borde del colapso.
Madrid se ha convertido en la ciudad española más afectada por la pandemia de coronavirus. El COVID-19 ha castigado España con 28.572 casos diagnosticados y 1.720 fallecidos. De esta manera, el país ibérico se ha convertido en el segundo territorio europeo más afectado por el COVID-19. Madrid con 9.702 casos diagnosticados (1.021 muertos), y Cataluña con 4.704 casos (191 muertos), son las comunidades más tocadas por el virus mortal.
Entre las medidas adoptadas por el Gobierno para afrontar la crisis sanitaria que presenta el COVID-19, figura el Real Decreto de confinamiento obligatorio en todo el país para evitar la exposición al virus. Un modelo de prevención exportado de China, tras su óptima gestión de la crisis en ciudades como Wuhan (primer foco identificado del coronavirus).
El decreto de confinamiento, aprobado por el Gobierno de España, era inicialmente de 15 días de duración y ha sido ampliado a otros 15 desde el 22 de marzo por el aumento de personas infectadas y fallecidas. Hasta el 11 de abril, solo se permite salir de casa por razones de provisión de alimentos y medicinas, para ir a trabajar, y para “pasear al perro”. Las personas que incumplan la orden del Gobierno se enfrentan a multas y penas de cárcel.
Este virus lo paramos todos
Bajo el eslogan #estevirusloparamosunidos y #quedateencasa, la campaña de cuarentena por la seguridad nacional, forzó al cierre de comercios, centros educativos, hoteles, centros deportivos y de ocio de todo el territorio nacional. También se restringieron las fronteras terrestres permitiendo su uso a ciudadanos y residentes españoles. Pero la entrada y salida de las ciudades se ha mantenido porque el Gobierno considera que todavía no es necesario.
Cerrar Madrid para salvar España del coronavirus
Madrid, la capital de España, se ha convertido en la ciudad con mayor tasa de mortalidad por coronavirus en el mundo, un 7,4% y en aumento. Es el epicentro de la infección ahora mismo en España y su sanidad pública se está viendo saturada ante el aumento de casos. Los hospitales ya no dan a basto, de modo que se ha habilitado en IFEMA un sector para albergar a miles de pacientes con casos leves.
Los sanitarios trabajan hasta llegar al agotamiento físico y mental, mientras que las medidas de contención parecen no funcionar. Los médicos de Madrid están afligidos por la situación, “los enfermos mueren solos porque sus familiares no pueden entrar”. El último dato recabado concluye que el 12% de afectados por el COVID-19 es personal sanitario, y eso que todavía no se ha llegado al “pico” que tanto menciona el Gobierno.
Al parecer, el modelo de confinamiento de Wuhan no funciona en España porque el confinamiento no es total. Las ciudades no están aisladas y el virus tiene libertad para viajar tanto por carretera, como por tren y avión. Es necesario un confinamiento total, que reduzca drásticamente el contacto con el virus. Ello supondría el cierre de las ciudades más afectadas, a las que se destinarían recursos de las comunidades menos afectadas.
Nos acercamos a la escalofriante cifra de 2000 muertos en todo el territorio nacional y la curva de nuevos casos va en aumento. Aislar Madrid y las ciudades con más contagiados, como se hizo en Lombardía y Wuhan, provocaría un ligero descenso de los contagios y decesos. Mientras Pedro Sánchez pide responsabilidad, disciplina y “sacrificio”, la muerte reina en las habitaciones de las UCI madrileñas y las residencias de ancianos.
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