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Extiendo mis felicitaciones a Jim O’Brien, quien asumió el cargo esta semana tras ser confirmado por el Senado como Jefe de la Oficina de Coordinación de Sanciones con el rango de Embajador. El Embajador O’Brien aporta décadas de experiencia en política exterior a esta función, habiendo ocupado altos cargos en el Departamento y en el sector privado.
La nueva Oficina de Coordinación de Sanciones supervisará el trabajo sobre sanciones y fortalecerá aún más la cooperación con aliados y socios en el uso de esta herramienta esencial. También promoverá la responsabilidad por la corrupción y los abusos de los derechos humanos y disuadirá e interrumpirá las actividades que amenazan nuestra seguridad nacional.
Esta es una oficina crítica en un momento crítico, y confío en que el Embajador O’Brien y su equipo prestarán un servicio extraordinariamente bueno al Departamento y al pueblo estadounidense.
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