Tras del teletrabajo viene el telestudio.
Con los malos resultados del verano, con rebrotes de coronavirus en casi todo el territorio español, se avecina un otoño “calentito” con el temor al contagio en el inicio del curso escolar.
Padres y profesores están amedrentados ante la perspectiva de lo que se les viene encima: un comienzo de curso sin haber planificado nada desde las instituciones gubernamentales ni desde las Comunidades Autónomas.
No se ha realizado un debate a nivel nacional sobre si la asistencia debería ser presencial en las aulas o si convendría mantener el aislamiento y el telestudio. Quizás lo mejor sea combinar ambos sistemas, pero nadie como los padres y los maestros saben lo difícil que va a ser en España. Máxime cuando hemos visto cómo lo encaran en otros países europeos o en los americanos y asiáticos.
Lo grave es que hemos dejado escapar los meses veraniegos, sin ensayar planes más o menos alternativos. Y ahora toca improvisar y ponerse con urgencia a la tarea. ¡A ver lo que nos sale!
‘Show’ descacharrante en la Plaza de Colón
Todos sabemos de la indisciplina de nuestra sociedad, demostrada hasta la saciedad con las medidas precautorias de las distancias sociales y el uso de la mascarilla. De lo que, encima, se hizo alarde en una plaza madrileña como un “show” descacharrante. Viendo las imágenes transmitidas por las televisiones, los ciudadanos corrientes quedamos anonadados por el comportamiento de estos energúmenos, que insultaban a los periodistas que no hacían otra cosa que difundir sus paranoias.
Mal asunto y peor ejemplo el de negarse a cumplir unas normas acordadas para prevenir contagios y tener la desfachatez de burlarse yendo por libre, comportándose como unos desalmados e insolidarios, que rechazan el esfuerzo de millones de compatriotas. ¿Acaso luego pedirán perdón, cuando aumenten las muertes y los contagios? Por las declaraciones de los instigadores y de los propios asistentes al penoso espectáculo, no parece que estén arrepentidos de lo que han hecho. ¡Venga la juerga y contagiémonos todos, que siga la fiesta nocturna y ahora también diurna!
Con ese ambiente social, ¿cómo se les va a pedir a los alumnos y a sus profesores, que sean responsables y sigan las normas establecidas para todos los ciudadanos?
¿Unos sí y otros no?
Penosas figuras en las más ‘Altas esferas’
Esto de lo ejemplarizante desde las altas instancias, trae a los españoles el mal recuerdo de lo vivido con el Rey Emérito. Que se ha autoexiliado para evitar el juicio de la Historia. Y, sin embargo, recibe de nada menos que 70 jerarcas políticos jubilatas un reconocimiento global por sus aportaciones a la Democracia. Obviando las trapacerías bajo cuerda, silenciadas por décadas, precisamente por esos mismos que sólo elogian “lo bueno” olvidando lo que les interesa.
Decididamente, la ley no es igual para todos, digan lo que digan los políticos, los jueces y los medios de comunicación. Todos ellos arrodillados y sumisos, al servicio de los poderosos.
Vamos a confiar en que tanto los padres, como los profesores y las autoridades educativas van a hacer el inmenso esfuerzo de encarrilar el inicio del curso lo mejor posible. Y, a lo mejor, llegamos al 2021 con un curso apañadito y recompuesto, pese a los rebrotes y los comportamientos negacionistas y reaccionarios.
¡Venga, viva la Escuela y la comunidad educativa!
Luis Lorenzo, ciudadano esperanzado con el telestudio.
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